domingo, 2 de julio de 2017

26° O Cebreiro

La mañana estaba mas que fresca, cuando salí ya amanecida, por las callecitas curvas del casco histórico de Villafranca: los restos de la muralla, el castillo, el viejo puente sobre el río..

Un poco lo de siempre, pero distinto al pasar por el cartel que anunciaba 200  kms. a Santiago! El ultimo cuarto del Camino! Parece mentira! Ya en la recta ( es una forma de decir) final?



Cuanto me queda? Una semana? Diez dias máximo? Ya???? Y cuando termine, que voy a hacer??? Para donde sigo???  Me imagino que por inercia seguiré poniendo mi despertador a las 5, poniendo todo a oscuras dentro de mi mochila, y saliendo a dar vueltas manzanas como poseida! Es tal la rutina y el ritmo adquirido que no me imagino volver a … mi vida anterior. Y que va a pasar con mis nuevos amigos? Como será volver a hablar solo una lengua por vez? Y cocinarme para mi sola? Y o cargar mas la mochila? Pero si ya forma parte de mi estructura osea? Y se me recuperaran los pies alguna vez? Volveré a bajar escalones con un pie en cada uno? Y no juntando ambos, antes de descender al siguiente? Y….?

Venia caminando un poco cabizbaja, imaginando un poco de todo ese futuro incierto, cuando veo a lo lejos, la mochila inconfundible de Dolores, con todas sus “bolsas anexas” de comidas listas para sus consecutivos atracones, frutas y “por las dudas” varios! Hacia dos dias que la había perdido, y la extrañaba….   Extrañaba  su risa a borbotones, la expresividad de su rostro y sus gestos grandilocuentes. Esta sueca parece una mezcla de latina con siciliana!

La alcance apurando mis pasos, y seguimos todo el día juntas. Lo pasamos muy bien juntas! Tanto que nos mandamos los 37 kms. Previstos para O Cebreiro!!!

No voy a decir que casi no nos dimos cuenta, porque la verdad es que los transpiramos! De hecho llegamos recién a las 7 de la tarde!  ( mi vez mas tarde que nunca! Por suerte aún había lugar en el albergue)




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Me titilaban los juanetes! Y la hebilla del corpiño ya la llevo incrustada en el esternón!
Las manos rojas de sangre de tantas horas colgando para abajo, y los ojos ganchos para no mirar lo que te falta.. Algo así como el antivertigo!...ja!


La famosa cuesta, que en diez kilometros, subis 1500 metros s.n.m.!!! La hicimos al mejor estilo elefante prusiano ( pisando fuerte y firme,, descargando todo el peso), y las bajadas en estilo cabra, para variar. Ya soy una colección de animales dentro mío! Cada vez mas mimetizada con la naturaleza! (Eso incluye barro, olores, pelos al viento, 0 noción del tiempo, necesidad de comer como nunca, y otras saludables variantes).


Pasamos por un pueblito donde alquilaban caballos par hacer la subida, pero habría que haberlos reservado con mucha anticipación.

Ya estaban todos comprometidos para hoy y los dias subsiguientes! Igualmente a un precio de locos:35 euros por las 2 horas que les lleva subirte ( a pata nosotras le pusimos 5 mas 1 de break de descanso intermedio!) Además ya no me apetece forzar a un pobre animal , que no elige lo que le obligan a hacer, soportando el peso de cuanto peregrino y su mochila sea,  forzando le la boca con el bridón y taconeándole el bajo vientre para que avance entre las piedras cuasi verticales. Eso si que es una animalada!

Lo cierto que paso a paso, como diría Serrat,  fuimos ganando altura, por unos paisajes increíbles! hasta entrar en tierras  Galicia!

Los bosques de abetos y cipreses, sombrearon gratamente el Camino, que a pesar de la hora, aún hervía de sol.

Las campañas del santuario nos dieron la bienvenida a un pueblito de chozas circulares de piedras con los techos de gruesas pajas y pequeñitas ventanas.




Musica celta animaba la única calle, abarrotada de puestitos de venta de souvenires alusivos al Camino: conchas, cruces de Santiago, flechas, símbolos galos, flechas amarillas, bastones, capas, heraldos de caballería en miniatura, lanzas de caballeros de las cruzadas, y cuanta chuchería exista.

Por ser domingo, mucha gente local visita la Iglesia y hacen picnics familiares en sus colinas.

Nosotras directo al albergue! Dolores a cocinarse su cena tempranera, yo a la ducha!

Pase por la cocina a ver que faltaba, fui a comprar a una tiendita vecina, e improvisamos una picada con una merecida cerveza helada, en el balcón exterior, con una sublime vista al valle…


Que mas se le puede pedir a la vida? A quien le importa 3 o mas ampollas?

El camino es exactamente como la Vida: nadie sabe cuan escarpado puede ser al día siguiente… ni con quien te encontraras, o a quien perderás de vista, pero siempre, siempre! Tiene compensaciones!.... Por eso es Hermoso y vale la pena!

Avanti!!!! Que mañana nos espera la bajada cabritos!....