Amanecimos entre la niebla a una temperatura un tanto fresquita para ser considerada de “verano”. Unos pescadores-héroes, en sendos botes, rompían la línea del horizonte donde el tenue sol se esforzaba inútilmente en aparecer.
Amanecimos entre la niebla a una temperatura un tanto fresquita para ser considerada de “verano”. Unos pescadores-héroes, en sendos botes, rompían la línea del horizonte donde el tenue sol se esforzaba inútilmente en aparecer.