Algunas de las ventajas de llegar a ser “mayorcita”, es que en el bus te ceden el asiento. Aunque cada vez que lo hacen, yo me pregunto: ¿en qué se me nota? Eso porque yo no me veo el mechón blanco modelo zorrino Pepé Le Pew (el francesito que persigue a una gata, se acuerdan de ese dibujito?) (O sea que vos sos mayorcita/o también! Ja!)