Con la fuerza de un nuevo amanecer, y la panza llena del dulce desayuno que nos prepararon las monjitas benedictinas, partir, a la siguiente etapa.
A la salida de León, una iglesia ultra moderna llamó mi atención y me invitó a entrar: La Virgen del Camino.
Sus vitrales y el órgano nada tendrían que envidiarle a su vecina Catedral de León.
Con la belleza de su sencillez logró cautivarme mucho más que a opulencia de la otra.
El silencio fresco y luminoso protegida la intimidad del recogimiento y la oración. Es el primer espacio “religioso” donde logre hacerlo desde que empecé el Camino.
Por lo demás puedes encontrar a Dios en cada cielo, en la brisa, en las flores, los campos cultivados, o en la sonrisa de cada peregrino:
En una bifurcación me encontré a Jonathan, un jovencito (21) con quien pretendimos sacar conclusiones de cual de los dos caminos seguir. Lo confundir con un americano, o un africano,y no se porque le pregunte en ingles. El buscando las palabras de su poco ingles, me explicó que el de la derecha nos llevaría bordeando la autopista y el de la izquierda …. “Es el lado del corazon!” propuse yo. Acordamos ese que prometia verdes campos…. Seguimos caminando juntos sin proponer nos lo y a los pocos metros, la tradicional pregunta: where área you from?
- “Colombia!” – me cuenta luciendo su orgullo y yo mi sorpresa: -Pues vamos con el castellano!”- le respondo entre risas compinches.
De ahí en mas seguimos toda la mañana en una animada charla (que por íntima no la describire, pero puedo asegurarles que fue mágica y nutritiva para ambos!).
La mañana iba fresca con un incipiente viento amenazador de lluvia, aunque agradecido nublado.
A la una pasamos por un pequeño pueblo con un mas pequeño aún almacen. Le pedí me esperara un minuto para comprar algo para armarnos unos sandwiches en alguna próxima parada. Quizá el siguiente pueblo a 6 kMS. Ya tendria todo cerrado.
Dudamos, paramos, entramos a comprar, y un trueno descargo un aguacero con minigranizo en segundos! No lo podíamos creer! Nos salvamos bajo techo por un pelito!
Nos quedamos allí refugiados los 15 minutos que duro la lluvia y apenas amaino, nos calzamos las capas, decididos a seguir. Ni una gota mas!
Aceleremos el paso al ritmo del viento in crescendo, dejando las nubes negras atrás…
Andamos y andamos y el pueblo no aparecía…
El viento empujaba y el cansancio aburria.
Decididimos picnear en un árbol amistoso, con mesa de Oso Yogui y todo. Yo tenia pan, queso y tomate, el jamón, pasas y aceitunas. De postre naranjas y chocolate negro!
Al retomar la marcha, el cartel indicaba que “solo” nos faltaban 3.6 km.para el albergue! Habíamos echo 29 casi sin darnos cuenta!
Cruzamos el puente de Órbigo, una reliquia del año 500! Tras el río, el merecido descanso!
No más entrar al albergue y en su patio estaba escribiendo Silvia! La argentina con la que bia llegado a Fromista.
Gran abrazo! Y tarde de charla compartida en el jardin.
En la cocina, al anochecer, te vas haciendo nuevas amistades entre ollas y olores de salsas varias. Todos te ofrecen compartir lo que están preparando, por lo que podrá pasar de fideos taiwaneses a tapas o bollos mexicanos, en un santiamén!
A las 21 nos convocaron (asistencia voluntaria) a una charla con el cura local y debo admitir que estuvo muy buena! Recordar que nuestros propósitos,o nuestras búsquedas… todo ya esta digitado mas Arriba! Solo debemos tener Fe y dejarnos llevar... Ponernos a Su disposicion! Parece un facilismo pero no lo es, al contrario! Dejar de lado el Ego y Confiar! No es para cualquiera…
22 hs. Se apaga la luz y salvese quien pueda de los ronquidos! Yo ya ni los oigo: 22,01 ya estoy en mi séptimo cielo! Les mando angelitos..
A la salida de León, una iglesia ultra moderna llamó mi atención y me invitó a entrar: La Virgen del Camino.
Sus vitrales y el órgano nada tendrían que envidiarle a su vecina Catedral de León.
El silencio fresco y luminoso protegida la intimidad del recogimiento y la oración. Es el primer espacio “religioso” donde logre hacerlo desde que empecé el Camino.
Por lo demás puedes encontrar a Dios en cada cielo, en la brisa, en las flores, los campos cultivados, o en la sonrisa de cada peregrino:
En una bifurcación me encontré a Jonathan, un jovencito (21) con quien pretendimos sacar conclusiones de cual de los dos caminos seguir. Lo confundir con un americano, o un africano,y no se porque le pregunte en ingles. El buscando las palabras de su poco ingles, me explicó que el de la derecha nos llevaría bordeando la autopista y el de la izquierda …. “Es el lado del corazon!” propuse yo. Acordamos ese que prometia verdes campos…. Seguimos caminando juntos sin proponer nos lo y a los pocos metros, la tradicional pregunta: where área you from?
- “Colombia!” – me cuenta luciendo su orgullo y yo mi sorpresa: -Pues vamos con el castellano!”- le respondo entre risas compinches.
De ahí en mas seguimos toda la mañana en una animada charla (que por íntima no la describire, pero puedo asegurarles que fue mágica y nutritiva para ambos!).
La mañana iba fresca con un incipiente viento amenazador de lluvia, aunque agradecido nublado.
A la una pasamos por un pequeño pueblo con un mas pequeño aún almacen. Le pedí me esperara un minuto para comprar algo para armarnos unos sandwiches en alguna próxima parada. Quizá el siguiente pueblo a 6 kMS. Ya tendria todo cerrado.
Dudamos, paramos, entramos a comprar, y un trueno descargo un aguacero con minigranizo en segundos! No lo podíamos creer! Nos salvamos bajo techo por un pelito!
Nos quedamos allí refugiados los 15 minutos que duro la lluvia y apenas amaino, nos calzamos las capas, decididos a seguir. Ni una gota mas!
Aceleremos el paso al ritmo del viento in crescendo, dejando las nubes negras atrás…
Andamos y andamos y el pueblo no aparecía…
El viento empujaba y el cansancio aburria.
Decididimos picnear en un árbol amistoso, con mesa de Oso Yogui y todo. Yo tenia pan, queso y tomate, el jamón, pasas y aceitunas. De postre naranjas y chocolate negro!
Al retomar la marcha, el cartel indicaba que “solo” nos faltaban 3.6 km.para el albergue! Habíamos echo 29 casi sin darnos cuenta!
Cruzamos el puente de Órbigo, una reliquia del año 500! Tras el río, el merecido descanso!
No más entrar al albergue y en su patio estaba escribiendo Silvia! La argentina con la que bia llegado a Fromista.
Gran abrazo! Y tarde de charla compartida en el jardin.
En la cocina, al anochecer, te vas haciendo nuevas amistades entre ollas y olores de salsas varias. Todos te ofrecen compartir lo que están preparando, por lo que podrá pasar de fideos taiwaneses a tapas o bollos mexicanos, en un santiamén!
A las 21 nos convocaron (asistencia voluntaria) a una charla con el cura local y debo admitir que estuvo muy buena! Recordar que nuestros propósitos,o nuestras búsquedas… todo ya esta digitado mas Arriba! Solo debemos tener Fe y dejarnos llevar... Ponernos a Su disposicion! Parece un facilismo pero no lo es, al contrario! Dejar de lado el Ego y Confiar! No es para cualquiera…
22 hs. Se apaga la luz y salvese quien pueda de los ronquidos! Yo ya ni los oigo: 22,01 ya estoy en mi séptimo cielo! Les mando angelitos..
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