A causa de
un imprevisto “intermezzo emocional”, decidí trazar una línea diagonal, desde
nuestro campamento en el Parque Nacional Mark Twain, sur de Missouri, para atravesar
los Estados Unidos rumbo Norte…. A donde los angelitos me lleven… sin
pretensiones!
Por cierto,
estando allí, me dio curiosidad por saber quién fue realmente Mark, además del
autor de las famosas “Aventuras de Tom Sawyer” y de “Huckerberry Flynn”
(dibujito que adoraba en mi niñez (lejana!)).
Tras encontrar una serie de sorpresivas coincidencias con mi vida! y
habiendo leído algunas de sus otras obras, les recomiendo “Cartas desde la
Tierra” , “el diario de Adán y Eva” y “El vendedor de Ecos”. No solamente
geniales, sino que me hicieron reir un montón, y sobreponerme a las largas
siestas de 39°C que en estos parajes, te inmovilizan entre el mediodía y las 6
de la tarde…
Volvamos a
la ruta de despegue: Casi a punto de derretirme, siendo las 9 am. emprendí el
dedo desde una estación de servicio en el pequeño pueblito de Alton.
Con la
suerte de principiante, y no me refiero a la primera vez a dedo como sabrás,
sino a la primera de esta temporada 2018!
Cazé un directo a Springfield! 3 horas por las bellas lomitas y colinas
de Missouri…. Sepan disculpar la
ausencia de fotos, pero no estaba de humor para sacar la maquinola y ponerme a
disparar . Por cierto, la réflex cada vez me parece más incómoda para viajar:
ocupa un montón, pesa un montón, y necesitás un montón de otras cosas para
acompañarla, como la funda de valijita, el cargador regrande, un filtro para
tener un mínimo de zoom apreciable, etc.…etc…
En fin, estaba quejosa! Aunque adoro mi cámara, las más de las veces,
termino usándola en automático, porque no es cuestión de estar poniéndose a
medir la luz y los efectos, en medio de la ruta…
Springfield
es una gran ciudad, con aeropuerto y todo!, de ésas en que los nudos y los
ochos de las autopistas para entrar, te dejan mareada! Con infinitos ramales y sube y baja de
puentes, desvíos y carteles indicadores. Con millones de autos, camiones, motos
y trailers (recuerden! aquí todos llevan anexado un tráiler a la cola!) como
hormigas a mil rodando por el asfalto hirviente.
No me
pregunten cómo MILAGRO salí con dirección a Kansas city! Y en 4 horas más, allí
estaba!
O sea,
cambié de Estado! Literal! De Missouri a
Kansas, de Comprometida a Soltera nuevamente!
O a Libre!, como prefieran…
Comienzan a
entender lo del humor? Y lo de salir disparada…
Ja!
Siendo ya el
atardecer, no me pareció prudente ir a conocer el Downtown (ni me interesaba
demasiado), ni ganas de arrastrar mi valijota Betty Boo, por las calles. (El
locker de guarda salía 8 u$s!!! imposible para una argentina en estos días!).
Por otro
lado, me habían dejado (y desde ya voy AGRADECIENDO a todos los invisibles
choferes y choferas que me han conducido en estos días en esta nueva Aventura!)
justo en la estación de buses Greyhound (la única línea que recorre “algunas”
pocas rutas de este país, donde TODOS tienen auto y nadie utiliza micros de
larga distancia. Un verdadero y abusador monopolio!).
Pretendiendo
tomar la mayor distancia posible de los últimos acontecimientos, decidí
comprarme un pasaje nocturno (y de paso ahorrarme el alojamiento) .
Destino?? Cualquiera! Para allá nomás…
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