Cruceros

Al despertarme y descorrer la cortina, ví que el paisaje había cambiado considerablemente; un tremendo crucero estaba estacionado en el puertito del Hellesylt.  Al rato llegó otro un tanto más pequeño.

Mientras desayunaba, tres bocinazos anunciaban la partida. Menos mal porque me daría fobia, encontrarme toda esa gente rondando un pueblito tan pequeñito, y por ende, encantador.

De echo, salí a caminar, con miras de recorrerlo, y anoticiarme de cual sería el mejor camino a tomar este día.

Un puentecito, me cruzó por encima de la cascada atronada de agua en tropel. 

Llegué a un túnel que por suerte tenía un caminito paralelo exterior para peatones. Me pregunté si sabrían que son peatones, porque por aquí, aún no vi a ninguno. Todo el mundo anda en auto.

Y yo disfrutando el aroma de las plantas empapadas de rocío, y de la tierra aún húmeda de la lluvia de anoche.  Hasta encontré helechos! En estas latitudes, primer milagro de la mañana?

Pasé por una iglesita de 1839, recoqueta, de culto luterano, por ende, sobria y austera. Mi fiel valijita, siempre dispuesta, me esperaba afuera para seguir disfrutando.

Seguí la pendiente en bajada y llegué al minipueblito de…..  léanlo uds. si pueden!  Yo paso!

Desde allí se veía arriba de la colina, mi hostel de la noche anterior:

Enseguida ví una cola de autos larguísima –que salían del túnel que yo no pasé- y me dí cuenta que esperaban ante la plataforma de un futuro ferry.

Pregunté y el próximo “crucerito” saldría en 20 minutos a recorrer el fiordo 

XXXXXXXXXXXXXXXXX, uno de los más bellos y publicitados de Noruega.

Pregunté el costo y salté 1metro para atrás!

Aunque pensándolo 5´ me dije: “No podés venir a Norway y no hacerte un paseíto en barco. Encima llegaste hasta acá “milagrosamente” sin saber ni de que fiordo se trataba, y ya estás aca!  Y sale en un ratitín…  Y bueno, sí dale! Date el gusto! Cuando llegues  Gerlanger, ya verás cómo seguir, y encima va hacia el norte que es tu destino…  Además tenés contigo tu valijota, ni falta hace que la tengas que ir a buscar al hostel, ya estás lista!  No hay excusas! Vamos!”

Me acerqué dispuesta a la boletería, y el muchachito me pregunta: -“¿Ida sólo? Un Senior?”

Por primera vez me alegré de tener más de 60! Costaba la mitad!!  “Dios da lana, a quien empieza a tejer” Ésta es una de mis frases de cabecera, me encanta! Y no falla…

Contentísima subí a bordo y me dispuse a disfrutar…. Se los comparto! 25 kms. en hora y media, y con música de la peli del Señor de los Anillos de fondo…  Puro verde placer….

Pasamos por varias cascadas, las Siete Hermanas, El Prometido y su novia con velo esperándolo enfrente en un amor imposible, según relataba el guía en el parlante en tres idiomas: Noruego, inglés y tano!  (Aquí hay más tanos turistas que japoneses, imagínense!! Son plaga!) Aunque resimpáticos! Siempre en grupo  y  a los gritos!! Ja! A lo tano!

   

Sin palabras...verdad?   pura belleza!!

Llegamos a Gerlanger  y era un manicomio de gente y buses de excursión y autoparlantes encaminado la muchedumbre según las excursiones contratadas, ya que dos gigantes cruceros habían atracado un rato antes. 

Encima salían todos los autos de mi ferry por otra explanada y yo no podía hacer ni un dedo tranquila! 

Y cada vez que un auto me paraba, no iba en la dirección que yo necesitaba, así 3 hasta que el 4° SÍ!!!  un directo a Andalness, 3 horas por delante!

Que se hicieron cinco, ya que parábamos en todas a hacer fotos! Ja! yo agradecida!  Eran una parejita joven de Moscú, así que enseguida les conté de mi cariño a mi nuerita Anastasia  En tu honor, tus vecinos rusos!: Victoria y Axel.

Que además me convidaron un helado de la marca más prestigiosa de estos pagos. Riquísimo! 

Aunque por suerte, las ovejas no quisieron, preferían su pastito. Más para mí!

Paramos en el punto mirador de   XXXXXXXX   donde para “todo el mundo”! y no exagero! Y todos somos como estas ovejitas siguiendo al rebaño….

La oficina de turismo remoderna, como emergiendo antes de un salto de agua de más de mil metros!,

Miren dentro del hoyo...

 con la particularidad de tener la ruta zizgueandole a la par, y una serie de miradores en voladizo que se comunican por pasarelas por sobre el abismo. Impresionante!

En una de las pasarelas me encontré a este fan de Messi con la camiseta de Argentina, y no pude menos que mandarle saludos. Se sonrió atónito, como enterándose que la argentina existe de verdad, de carne y hueso! Su mamá tuvo que explicarle.

Aquí es el paraíso de los motoqueros, y hasta tienen su propia estatua de troll (gnoma) y las leyendas siguen al pie de la fantasía.

Finalmente llegamos a Andalness y me dejaron en la puerta del hostel, como a dos angelitos corresponde! Yo feliz y agradecida!  Salí a recorrer un poquito más, a pie, la ciudad y me encontré con el broche de oro: Una Capilla en un Vagón de tren!!!!  Éste sí que me ganó en locura y creatividad!  Encantador…

Dios los bendiga, a domani! Baccio! Ciao!