lunes, 12 de agosto de 2019

Cultura, Sauna & Fin...


Siguiendo con las pautas de una viajera (o con las patas de esta hormiga) escribiente, me picó la curiosidad de conocer por dentro el edificio que el otro día les presenté desde afuera, parecido a una ballena. Resultó ser la biblioteca pública de Helsinki. Y me maravilló!


No sólo por su diseño y los detalles constructivos, sino más bien, por la vida que albergaba ya a las 10 de la mañana!  

Desde bebotes con sus mamás leyéndoles sobre una alfombra mágica, 



  


















Hasta todos los diferentes espacios para la lectura, la elección y devolución de libros (por cinta mecánica computarizada), salas de reunión, talleres de actividades varias, juegos electrónicos para adolescentes, fotocopiadora virtual, inteligencia virtual (hice una experiencia en 3D de 5´que me alucinó), ploteadoras y tablets disponibles a la mano de quien las necesite, etc. etc.





Y hasta había libros en español! Me hubiera quedado la vida, ahí tirada leyendo...












Todo modernísimo, super limpísimo, silencioso y armónico a la enésima. Ambiente de estudio más que placentero, y terraza con bar para el recreo!


Seguí por el mercado callejero, pero mo pude sacar fotos porque tenía las manos ocupadas de riquísimas frutillas! Perdón que no convide…

De ahí, a testear otro aspecto fundamental de los finlandeses: el sauna! Ja!

Hay saunas con piletas públicas en diversos puntos de la ciudad. Elegí uno frente al mar…






Toda una experiencia!

Entrar al vestuario donde todas están en pelotas, ya me había pasado en Islandia, pero entrar al sauna y encontrar que es mixto es toda una aventura!

Primero el sofocón de temperatura que casi me quema los pulmones del lado de adentro, y luego sentirte la Virgen María, al ser la única que entró con malla!

Encima había tanta gente como en un colectivo, donde entran y salen, como llegaron al mundo, con una impunidad cotidiana. (Obvio no era momento de fotos, y el lente se empañaría de vergüenza de inmediato)

Sólo portan una toallita de papel para apoyar el culo en la estantería de madera que te cocina hasta el útero.

Nunca en mi vida había visto tantas nalgas, pechos, pitos, abdómenes, flacideces varias, modelos diversos de celulitis, arañitas, granos, manchas, pelos, gomas infladas y otras por el piso o inexistentes, y tatuajes al por mayor!

Algunos charlan como si estuvieran en un café, botellita de alcohol o agua fresca en mano, otros en absoluto silencio, contemplan las piedras que alguno salpica eventualmente con un cucharón de madera, para levantar más vapor.

Cuando logré aquietar mi estupor, y dominar mis ojitos curiosos, decidí que era lo más aburrido que había hecho en los últimos 40 días!, por no decir en varios años.

Eso de quedarse quieto adobándose, no es lo mío!

Encima se supone que estás un rato, y luego debes ir a zambullirte al agua fría!

Para eso hay una pileta con agua de mar a temperatura ambiente (afuera llovía) Ergo: helada! Y otra con 28°C, que me dijeron era más calentita…  Para ellos!  Yo me congelé apenas introduje el tobillo, pero no era cuestión de perderme la experiencia, así que me zambullí de una y me hice unos cuantos largos de crawl para recuperar el calor. Ahora sí, los pulmones podían morirse de muerte natural! Pero lo hice!

Al ratito, salí bajo la lluvia (ya estaba más que empapada), y volví al sauna con mi papelito para la cola y me quedé quietita, recuperando las pulsaciones y debatiéndome si me animaría a sacarme la malla. Advertencia: ganó el pudor y la matriz castradora de mi educación latina.

Otra super diferencia con las escandinavas es que casi no tienen arrugas!  He visto mujeres regrandes con la piel impecable!  ¿Será que casi no toman sol, porque por aquí casi no existe? ¿Será que tienen mucha plata para comprarse cremas carísimas? No lo sé, sólo sé que me llamó mucho la atención, la blancura y lisura de los rostros, y con ojos verdes agua o celeste transparentes, muy muy muy claros.. Lo del rubio, ya se sabe!

Volvamos al recinto del sauna.

Aguante otros 10 minutos aproximadamente, pidiéndole a mis toxinas que se apuren a salir de una vez, y de paso, todas las limpiezas emocionales que se le cantara a mi alma, para volver a la pileta a nadar como en mis años adolescentes, ya que nunca se sabe…

Paró de llover y apareció un rayito tímido. Aproveché para salir y testear una reposera, pero el viento marino, me amenazó con una pulmonía. Aunque todos los locales, se empeñaban en no darse por avisados. Mi prudencia me indicó volver a aburrirme al sauna, por lo menos estaría calentita.

Entre tanta ida y venida, me agarró hambre, por lo que preferí una buena ducha, vestida y fin de juego para mí.

Fin de Fin-landia!



Porque para las 16 hs. debía presentarme en el puerto, con mi e-ticket (que modernidad!) para abordar el “barquito” que me cruzará a Stockolm,





Resultó ser uno de esos enormes, que fotografiaba los días anteriores, de varios pisos, donde entramos miles de pasajeros!






Zarpamos!!!....




Así que ya estoy a bordo, compartiéndoles este nuevo trayecto!



Me voy a recorrer mi nuevo hábitat antes de volarme con el viento , después les cuento!

PD:  Adentro ya están todos mamándose, con las maquinitas tragamonedas, shows en vivo, magos, free shop, sauna y spa, ruleta y cuanta "diversión" puedan comprar!
Aunque este intento de tango,,,,me conmovió! ja!


Buenas noches, basta para mí! Pido "pido"!

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