viernes, 16 de agosto de 2019

Rainbow


Despertarse y que esto te esté esperando en el comedor, es más que un buen augurio para el día.



El único problema, es que no te lo puedes comer todo!! (por más que lo intenté). 

Y tampoco queda lindo, entrar a guardarse cosas en los bolsillos, o andar llenándose una canasta privada.







En fin, lo más importante me lo he llevado puesto: la Alegría de haber visto las casas en los árboles, y esta mañana haber compartido una buena charla con el dueño del hotel, y creador del proyecto. Me explicó varios datos técnicos. La convocatoria que hizo a distintos arquitectos de Escandinavia e Islandia (Uno por cada modelo diferente) y que esto empezó en el 2010.

Me contó que conoce bien la Patagonia Argentina porque cada dos años va a pescar a Rio Grande, Tierra del Fuego, y se interesó por lo que le conté de la deforestación en La Angostura y prometió visitarme en pro de revisar la posibilidad de hacer algo similar allá por mis pagos.  IuPPI!! Ojalá!

Lo cierto que hoy me costó dejar este lugar…

Algo que te impone este tipo de viajes que hago, es el constante aprendizaje de “soltar”…  dejar atrás las experiencias, los lugares, la gente, etc. y abrir la mente y el corazón a nuevos pasos. A veces cuesta más que otras!

Aunque hoy tenía una buena propuesta:  ayer conocí a unas chicas –muy hippies- que iban a un “Rainbow” a dos horas de Harads (lugar del Tree Hotel).

Me pasaron la invitación por whatsapp, y me entusiasmó la idea de ir a participar.

Me contaron que se reunían y acampaban en una montaña junto al lago, lejos de toda civilización, para alabar y peticionar por la Madre Tierra, durante Agosto –en especial este día que sería luna llena- unas 3000 personas!

El programa incluía workshop en referencia al problema de deforestación que está sucediendo en Suecia, donde se han perdido todos los bosques nativos, en virtud que la empresas papeleras arrasaron con todo, para plantar monocultivos de pinos y eucaliptus. Me super enganché!! Y esta mañana me dirigí hacia allá, a pesar de no tener ni carpa ni bolsa de dormir.



Confié en mis angelitos , que algo bueno me iba a pasar!

No tuve más remedio que hacer dedo, porque no había otra forma de llegar, por unas rutitas muy locales. Ergo, los posibles choferes no hablaban inglés! Y era complicado hacerse entender.

Pero como de costumbre, llegué!

Llegué al inicio del camino, porque a partir de esa ruta, debías caminar 2 ½ horas por senderos de tierra, rocas, musgos, barros, piedras, piedritas, etc.




Ergo, con mi valijota, imposible! De hecho, ya se me murieron las rueditas, la voy arrastrando simplemente rompiéndoseme la tela del borde inferior, día a día…

Como soy muy cabeza dura, y estando ya allí, decidí esconderla entre unos troncos y cubrirla con ramas secas, o sea camuflada, aprovechando que es verde!

Invoqué a los angelitos protectores, y me encaminé con sólo la mochilita de los documentos, la plata y la botellita de agua.

Cantando al estilo Caperucita, fueron pasando las horas, y cada tanto me cruzaba con algún “hippie” –mochila en la espalda y borcegos, ollas y mantas, colgando- en sentido opuesto. O sea, lléndose!

Uno hasta me ofreció una carpa y una garrafa de regalo, con tal de no seguir cargándosela. Lo pensé dos segundos, y le agradecí la oferta, pero yo tampoco estaba dispuesta a cargarlas.

Tras dos horas y pico, divisé al grupo humano y las primeras carpas.




Estaban en un gran círculo repartiendo la comida. De las tres mil, yo diría 500, pero no dejó de asombrarme que hubiera tal cantidad de gente allí acampando en pro de “Paz y Amor”.


Traté de divisar a las chicas del día anterior entre la multitud, y me sorprendí de ver unos cuantos desnudos y/o semi. Mucho olor a porro. Varios canturreando con guitarras, un gran teppee a modo de placard de utensillos de cocina y almacenamiento de MUCHA comida (al parecer donaciones de no se quién).

En eso escuché un “María!”, y era una de las chicas que me reconocía. El tema era que yo no me reconocía en ese lugar. Era como haber entrado en una película de Woodstock, del 60!

Acepté el almuerzo (arroz con lentejas) en un plato que me donaron. Enseguida alguien me ofreció una bolsa de dormir y lugar había en la carpa de las chicas.

Entre mí me preguntaba: “¿Qué estoy yo haciendo acá? ¿ Cuándo dónde será la charla de deforestación o el trabajo sobre las propuestas?

Entre tanto me iba enterando de otros workshops como masaje tailandés, meditación sufí, cantos gregorianos, etc.

Y que a esto lo llamaban “Campamento de Resistencia”  ya que habían tomado esas tierras con apoyo de los Sami (originarios de Laponia) (Ya estoy otra vez por encima del Cículo Polar Ártico). Que estos festivales eran itinerantes, la mayoría venía del de Alemania, y antes de República Checa, etc. Que esto se repetía desde hace 40 años en muchos otros países, y que era una forma de nomadismo organizado para no formar parte del sistema.

(Ergo, ¿estos chicos no trabajan? ¿quién los banca? Ya me salió la enjuiciadora!)
Lo cierto es que entre el exhibicionismo, el manoseo de tanto abrazo entre “Hermano” y “Hermana”, los gritos convocando a los diversos grupos, la falta de baños, las nubes negras con vientito que auguraban tormenta segura, (yo ni había llevado la campera) y mi valija escondida a 2 horas de distancia, hicieron que en un segundo decidiera “Basta para mí!”

El tema era llegar a esa ruta desértica, ya siendo más de las 6 de la tarde, y a vaya saber que distancia de un pueblo con hotel…

Pero los angelitos están en todas!!!

No bien empecé a caminar para huir de allí, estuve a punto de pasar a dos mujeres “con aspecto más normal”.

Saludé como de costumbre y enseguida me dí cuenta que serían locales que estaban chusmeando (como yo!)

Les pregunté y ALELUYA!!!! Eran locales que ya se iban para Jokkmokk, el pueblito más próximo, en auto!!!   Que habían dejado justo donde yo había dejado mi valija!  ¿Se lo pueden creer???  GRACIAS ANGELES DE LA ORGANIZACIÓN Y PROTECCION!!

Angelitas Cecilia y Silvia disfradas de locales
Super Agradecida, me trajeron hasta un hostel, y aquí estoy, contándoles “la aventura” de hoy, tras una ducha y sabrosa cena: sopa instantánea y huevos fritos! (que había en la heladera para uso comunitario, ja!)

Estos alados, están en todas! La mejor Agencia de Viajes del Universo!

Hasta había un postrecito de mango! Se los comparto!

Y que Uds. también descansen soñando con ellos… y nunca se olviden de Agradecerles! Porque ellos nunca se olvidan de vos!

Chan- chan!

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