Hablar de "mi suerte" para llegar a Jyväskylä, distante 500 kms. desde mi punto de origen esta mañana, sería una redundancia, y ya me está dando "cosita" alabar tanto a las causalidades que se entretejen para obrar semejantes "Milagros", así que pasaré a contarles directamente el porqué de elegir venir a esta ciudad en medio de Finlandia, a 250 kms. de la capital.
Me es tan difícil pronunciarla, que me da lo mismo del derecho que del revés! |