Continua la dulce espera y nada…
Entonces salí a caminar… Primer día en varios que no lo hacía.
De hecho, aún no había “pisado” la ciudad. La había recorrido en auto, por
autopistas o avenidas abarrotadas, pero poco o nada caminada.
Continua la dulce espera y nada…
Entonces salí a caminar… Primer día en varios que no lo hacía.
De hecho, aún no había “pisado” la ciudad. La había recorrido en auto, por
autopistas o avenidas abarrotadas, pero poco o nada caminada.
Estuve rastreando la dirección de la Fundación Wangari Matthei en internet, pero no aparecía ninguna, solo un teléfono que no contestaba nunca.
Tampoco
había recibido respuesta de los dos mails anteriores que le había mandado desde
Argentina. Tampoco había habido respuesta a los mensajes al @instagram.
Pero como la
perseverancia es una de mis virtudes, y preguntando se llega, tenía que
encontrarla.
Tercer día sin luz, ergo, muy difícil cargar el celular y la compu. Mucho menos tener internet para contarles todas las maravillas que vivo por acá. Aunque a esta altura, ya ven que sobrevivo…
Para los
kenianos estamos en invierno, aunque hagan preciosos 25°C. Es muy extraño
verlos con camperas o pulloveres mientras yo puedo lucir una remerita
refrescante después de tantos días de calor en el norte y trapo envolviéndome
el torso por respeto a otras tradiciones.
Con Winnie y su amigo Sami partimos temprano en su autazo! al Orfanato de Elefantes. En la web indicaban que de 11 a 12 hs. se podía alimentar a los bebés con mamaderas. Allá fuimos!
Pero al llegar una cola enorme de camionetas y jeeps 4 x 4 de las compañías de turismo, ya habían tomado todas las entradas posibles. ¡Claro! Venden el paquete completo de sus excursiones unos cuantos meses antes! Van a buscar a los turistas, en su mayoría europeos, japoneses, turcos y rusos, al aeropuerto y los llevan directo a este paseo en las afueras de Nairobi. Es una avalancha en masa, que no se puede creer! Encima estamos en su mejor temporada: Julio, el mes seco! Imposible conseguir un lugarcito…¡Super frustración para mí! Pero como es, como tiene que ser…